Las tres réplicas del demonio responsable de los raptos acorralan a Tanjiro, cuando su hermana acude al rescate. Nezuko, convertida en demonio, demuestra que ella también es lo bastante fuerte para proteger a los demás. Tanjiro se decide a perseguir a una de las réplicas hasta el interior de la ciénaga en la que se esconde, la cual se extiende bajo el suelo por donde pasa. En sus turbulentas aguas descubrirá la verdad sobre los secuestros.