Diego es un médico acostumbrado a manejar situaciones límite, que se ha inmunizado ante el dolor ajeno. El intento de suicidio de Sara, una de sus pacientes, provocará que el compañero sentimental de ésta señale al médico como responsable directo de lo ocurrido durante un amenazante encuentro. Horas después, Diego sólo recuerda el ruido de un disparo, y la extraña sensación de haber recibido algo más que un encargo durante este incidente…