Durante las compras de Navidad, Bart se escabulle y obtiene un tatuaje. Marge pronto descubre ésto y usa el dinero familiar destinado para los presentes navideños en removérselo. Mientras tanto, Homer descubre que no va a recibir el bono navideño por el Sr. Burns y en secreto obtiene un trabajo como parte del departamento de Santa Claus, pero más tarde descubre que en ese trabajo no se paga lo suficiente. Desesperado por la presión, Homer y Bart van hacia las carreras de perros en vísperas de Navidad con la esperanza de ganar algo de dinero. Él apuesta todo a Santa’s Little Helper, quien pierde. Santa’s Little Helper es liberado por la frustración de su dueño y les permite a Homer y a Bart conservarlo. Más tarde, Homer trata de explicar que la Navidad está arruinada, pero Bart exclama que tienen un perro y todos felices acogen con satisfacción al miembro más reciente de la familia Simpson.