Maltazard ha conseguido colarse en el mundo de los humanos. Su objetivo es sencillo: reclutar un ejército de gigantescos secuaces y dominar el universo. Arthur parece ser el único capaz de frustrar sus planes, pero primero tendrá que volver a su habitación… ¡y recuperar su tamaño normal! Aunque sigue atrapado en un diminuto cuerpo de minimoy, contará con la ayuda de Selenia y Betameche, y, sorprendentemente, también la de Darkos, el hijo de Maltazard, que afirma estar de su lado. A pie, en bici, en coche o incluso en una Harley Davidson, Arthur y sus amigos emplearán cualquier medio a su alcance para librar su batalla final contra Maltazard… ¡Que empiece el combate!